En la actualidad, los algoritmos se han orientado a segmentar los anuncios según personas, intereses y comportamientos. El marketing psicográfico es la tendencia que se orienta más que en una persona, en una necesidad de usuarios específicos. Para aplicarlo de manera correcta se debe tener en cuenta: qué es importante para los compradores, qué marcas les encantan o cuáles son sus aficiones. Google Ads aporta una serie de datos para el marketing psicográfico que puede aumentar o disminuir la oferta para públicos en particular. Facebook también orienta sus anuncios a bloques de anuncios que toman en cuenta intereses y hábitos.